Como sus inmediatos ancestros osteostráceos, Cephalaspis estaba fuertemente acorazado, presumiblemente para defenderse de los predadores placodermos y euriptéridos, y probablemente, para servir como una fuente de calcio para las funciones metabólicas en el medio acuático con niveles bajos de este elemento. Estos poseían parches sensoriales a lo largo del borde y centro de su escudo protector de la cabeza, los cuales se usaban para localizar gusanos y otros organismos enterrados en el cieno.
Debido a que la boca de Cephalaspis estaba situada directamente bajo la cabeza, se piensa que pudo haberse alimentado filtrando sobre el lecho marino, de modo similar a los peces acorazados, gato o esturión. Este movía su cabeza en forma de arado de lado a lado, agitando fácilmente la arena y el polvo dentro del agua, al mismo tiempo revelando los escondites de sus presas, desenterrando gusanos y crustáceos ocultos en el lodo y algas, así como hurgando detritus.
Los creadores del documental Walking with Monsters sugirieron que Cephalaspis, o uno de sus relacionados fue un ancestro de los peces con mandíbulas y otros pertenecientes al subfilum Gnathostomata.
Sin embargo, Cephalaspis pertenece a la clase Osteostraci, un grupo el cual se cree fue un grupo hermano de todos los vertebrados con mandíbula. Así, mientras Cephalaspis no fue un ancestro directo de de los vertebrados sin mandíbula, estos sin embargo compartieron un ancestro común.
No hay comentarios:
Publicar un comentario